Condromalacia Rotuliana
La condromalacia rotuliana, también conocida como síndrome fémoropatelar, condromalacia patelar o condritis rotuliana, es una enfermedad caracterizada por la degeneración de la superficie articular del cartílago que constituye la cápsula de la rodilla.
La condromalacia rotuliana, también conocida como síndrome fémoropatelar, condromalacia patelar o condritis rotuliana, es una enfermedad caracterizada por la degeneración de la superficie articular del cartílago que constituye la cápsula de la rodilla.
Síntomas
El síntoma predominante es el dolor sensible en la parte delantera de la rodilla que comienza de manera gradual y se suele relacionar con la actividad física, pudiendo presentarse en una o ambas rodillas. El dolor se describe durante el ejercicio cuando se flexiona repetidamente la rodilla, como en las sentadillas, o en relación a ejercicios de salto o carrera. Muchas veces aparece después del ejercicio o después de estar sentado un largo periodo de tiempo con las rodillas en flexión. Los chasquidos o sonidos crepitantes al subir escaleras o al ponerse de pie son frecuentes sin indicar gravedad.
¿Quién tiene más riesgo de padecerla?
- Adolescentes: por desequilibrio músculo-esquelético durante el crecimiento.
- Mujeres: con frecuencia con menos masa muscular y por factores hormonales y de anatomía pélvica.
- Deportistas de alto nivel.
- Personas con fracturas previas de rótula, luxación o subluxación u otras lesiones de rodilla.
- Personas con pie plano moderado o severo.
¿Qué causas lo provocan?
- Traumáticas: golpes sobre la rótula pueden generar un choque entre ésta y el fémur provocando una inflamación del cartílago. Ciertos ejercicios de cuádriceps, con o sin peso, hacen que la tensión que se genera en el tendón rotuliano, oprima la rótula contra el fémur provocando un rozamiento entre estas dos estructuras, acabando en una condropatía rotuliana. Torsiones de tobillo o rodilla pueden subluxar la rótula y generar daños en el cartílago.
- Biomecánicas: en general, cualquier desequilibrio de la cadena funcional: tobillo, rodilla, cadera, pelvis o columna. Insuficiencias musculares, como los pies valgos, desplazan la rótula lateralmente y esta desalineación puede provocar degeneraciones del cartílago.
- Infecciosas – reumáticas – metabólicas:
- Procesos artríticos producidos por cristales de ácido úrico.
- Infecciones articulares.
- Inflamaciones producidas por trastornos metabólicos como inflamaciones hepáticas, intestinales, renales….
- Diabetes.
- Osteocondritis disecante.
- Cambios bruscos de peso: en caso de aumento de peso por el cambio anatómico que se genera y en casos de pérdida brusca de peso, por la infracarga que esto supone para el cartílago y por la pérdida de masa muscular.
- Degenerativas: causa más habitual de problemas de cartílago sin un motivo aparente. Son procesos que aparecen de forma lenta y progresiva, el metabolismo del cartílago es braditrófico (de ritmo metabólico o tráfico lento). Suelen ser personas sedentarias, con hábitos alimenticios no muy saludables o con posturas en el trabajo agresivas para la rótula.
Grados de la condromalacia rotuliana
- Grado 1: dolor leve, por reblandecimiento del cartílago, síntomas leves de dolor que suele presentarse por alguna posición o ejercicio, el calzado o cambios climáticos
- Grado 2: dolor más intenso, por una pequeña fibrilación del cartílago que perdura con el tiempo, y es posible visualizar el desgaste a través de la resonancia magnética.
- Grado 3: dolor más intenso, la superficie del cartílago se fisura llegando a las capas profundas y viene acompañado de inflamación intensa.
- Grado 4: aparecen úlceras y alteraciones en el hueso subcondral. Pérdida del cartílago articular, dolor incapacitante y permanente de la articulación, acompañado de inflamación, e inestabilidad articular.
Tratamiento
Puede incluir o combinar las siguientes opciones:
- Cambios de actividad: cambiar tu rutina de actividades a bajo impacto, igual que cambios en la superficie de entrenamiento o calzado.
- Disminuir la carga: si tienes sobrepeso, perder peso también ayudará a reducir la presión en sus rodillas. En ejercicios, bajar la carga, aumentar el número de repeticiones e incrementar la densidad de fibras musculares.
- Musculación del vasto medial del cuádriceps y los aductores: beneficios de los ejercicios de cadena cinética cerrada. Se recomienda realizar ejercicios como sentadillas o zancada, los cuales pueden empeorar levemente el dolor los primeros días, pero a medio plazo demuestran resultados excelentes.
- Ejercicios de Core: el fortalecimiento de abdomen-lumbares, glúteos e isquiotibiales obtienen grandes beneficios en las lesiones fémoro-patelares.
En Global Medical contamos con un equipo de especialistas en este tipo de tratamientos, liderado por el Doctor Soria, que cuenta con la tecnología más avanzada y con una amplia experiencia en esta materia.
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